¿Te has hecho un análisis de sangre y te han detectado falta de vitamina D? Te sorprenderá saber que en los últimos años se ha detectado un importante déficit de esta vitamina en los españoles, debido a la falta de exposición al sol. ¿Quieres saber qué hace la vitamina por tu salud, y cómo puedes solucionar su carencia?
La función de la vitamina D
La vitamina D asegura un buen funcionamiento de nuestro organismo, ya que interviene en diversos procesos.
Para empezar, juega un papel importante en la formación de los dientes y los huesos, y también los mantiene en buenas condiciones ya que interviene en el mantenimiento de los adecuados niveles de calcio en sangre. Además, si nos falta vitamina D nuestras articulaciones tampoco funcionarán adecuadamente.
Igualmente, hay que tener en cuenta que esta vitamina es importante para el buen estado del sistema nervioso, la producción de hormonas y la actividad cardíaca. Incluso nos ayuda a dormir bien y a estar de buen humor, ¡fundamental para tener un buen día a día!
Síntomas de la falta de vitamina D
En la mayoría de casos, nos enteramos de la falta de vitamina D por los resultados de un análisis, ya que no tenemos ningún síntoma que nos haga pensar en este problema. De hecho, solamente cuando la carencia se mantiene durante mucho tiempo es probable que notemos síntomas como cansancio, dolor o debilidad muscular. Especialmente característico es el dolor en la espalda.
A pesar de esta aparente ausencia de síntomas a corto plazo, no podemos olvidar que la falta de vitamina D puede provocar pérdida de densidad de los huesos. Por lo tanto, tendremos más posibilidades de sufrir fracturas, osteoporosis e, incluso, osteomalacia, una patología que causa dolor y debilidad en huesos y músculos.
Personas en riesgo
Aunque algunos alimentos tienen más cantidad de vitamina D que otros, realmente quien la sintetiza es la piel. Por lo tanto, las personas que no salen mucho de casa o las que no toman el sol – como los ancianos – tienen más posibilidades de ser sufrir por la falta de vitamina D.
También hay que tener en cuenta que algunas situaciones provocan la mala absorción de esta vitamina, aunque haya una correcta exposición al sol:
- Ser celíaco
- Tomar ciertos medicamentos, como los corticoides
- Estar embarazada
- Tener sobrepeso
- Tener insuficiencia renal
La recomendación de ingesta de vitamina D en personas sanas, dependiendo de su edad, es:
- 600 UI/diarias en adultos, incluyendo mujeres embarazadas y lactantes
- 800 UI/diarias a partir de los 70 años
- 400 UI/diarias en niños de hasta 12 meses
Estas cantidades pueden incrementarse en función de las necesidades físicas de cada persona, como por ejemplo la prevención de la osteoporosis , la prevención de la gripe o el período de post-menopausia.
¿Cómo corregir la falta de vitamina D?
Sin duda, una adecuada exposición al sol, controlada para evitar quemaduras y problemas cutáneos, es fundamental para que nuestro cuerpo empiece a sintetizar adecuadamente la vitamina D. De todos modos, podemos ayudar a subir nuestros niveles de esta vitamina introduciendo cambios en nuestra dieta y tomando suplementos de vitamina D.
Algunos alimentos contienen un índice más elevado de vitamina D, como la carne, el hígado de ternera, la yema del huevo y los pescados grasos, como el arenque, el salmón y la caballa. Introducirlos en nuestra dieta de manera habitual nos ayudará a mejorar nuestro nivel en el organismo de este nutriente.
De todos modos, si tenemos una falta de vitamina D importante, es recomendable que recurramos a suplementos que nos ofrecen un concentrado de este nutriente, y que pueden combinarse con la ingesta de otros elementos como el calcio o la vitamina K para mejorar su efectividad.
